Hace algún tiempo, una persona muy especial me regaló una cubertería. Hasta aquí todo bien. Antes de regalarme las piezas, me preguntó qué tal andaba de cubiertos. Y yo apresuradamente le respondí que “regulín”. Error. Bueno. O no. Para mi sorpresa la cubertería no estaba mal, pero… ¡era una cubertería del Real Madrid! ¡Horror! Me sentí presa de mis palabras y por un momento por mi cabeza empezaron a desfilar imágenes tan kitchs como bailarinas de flamenco encima de televisores, abanicos con puntillas, tapetes de crochet sin ton ni son y jarrones de porcelana que yo, nunca jamás, pondría en mi casa.

Con mi espléndida cubertería en mano, bastante completa, que incluía cubiertos para pescado, carne y postre, decidí tunearla y borrar la huella futbolera para siempre. Como dice una buena amiga: “hay cosas que es mejor taparlas” ;). El primer paso, y el más difícil, fue negociar con mi pareja, futbolero empedernido y por supuesto seguidor de dicho equipo, el hecho de transformarla. El segundo fue explorar diferentes posibilidades para cambiarla de aspecto. Trazado el plan, comparto con vosotros el resultado y el proceso en este tutorial, por si os puede interesar, que espero que sí.

Materiales para tunear tu cubertería

En realidad necesitamos pocos materiales, y muy baratos.

Coge papel y lápiz y ¡toma nota!

Cubertería

Purpurina

 Cinta adhesiva

 Barniz transparente para pintar las uñas

 DuraClear Gloss Varnish

Tunear la cubertería paso a paso

Paso 1. Pon cinta adhesiva a la cubertería

Antes de empezar a tunear nuestra cubertería, es fundamental preparar nuestro espacio de trabajo. Para proteger la mesa necesitamos un cartón o cartulina, o lo que queramos. Una vez puesto nuestro protector, ponemos todas las piezas a la misma altura y colocamos cinta adhesiva para delimitar la zona que vamos a trabajar y a cubrir con purpurina.

Paso 2. Aplica una capa de brillo para uñas

El brillo para pintar las uñas actúa de forma similar a un pegamento. Aplica una capa sobre la zona que quieras cambiar y a continuación espolvorea suavemente la purpurina, cubriendo toda la zona. Una vez cubierto, espera a que seque.

Paso 3. Aplica el Gloss Varnish

Este material lo utilicé justo al final del proyecto. En un principio solo iba a tunear la cubertería con brillo para las uñas y la purpurina. Pero lo cierto es que la purpurina se soltaba algo. Y tampoco es plan de tener una cubertería molona, pero ver cómo a todos tus comensales les sale la purpurina por las orejas.

Estuve viendo diferentes tipos de materiales. En un principio me apetecía probar con el barniz de dos componentes, pero no tenía moldes para aplicarlo. Este tipo de barniz da un acabado duro y fija perfectamente la purpurina, pero yo todavía no lo he probado. Además, hay que esperar 24 horas hasta que se seque completamente y utilizarlo en sitio bien ventilado porque su composición es un poco más agresiva. Así que decidí descartarlo.

La otra opción era aplicar una capa de barniz especial para trabajos manuales. Probé con el DuraClear Gloss Varnish por varias razones: 1. porque no se amarillea con el paso del tiempo, 2. era mucho más barato (no me costó más de 4 euros) y 3. el tiempo de espera para el secado era bastante inferior. Apliqué la primera capa y tras esperar a que se secara, apliqué una segunda. Y listo. Ya tenemos nuestra cubertería tuneada.